Llegan los 60 años y comienza una nueva etapa en la vida, que comúnmente llamamos tercera edad.
La Jubilación
Ser jubilado o pensionado siempre tuvo mala prensa, a tal punto que la palabra jubilado o pensionado se suelen usar como sinónimo de viejo. Imagínate decir persona de la tercera edad.
Contrariamente a lo que suele vaticinarse, muchos jubilados aprovechan ese momento de la vida para gratificarse con todo aquello que fue postergado por el trabajo, la crianza de los hijos u otras obligaciones. Por lo general, para las mujeres, es un momento muy esperado.
En ese momento puede llegar la oportunidad de viajar, de aprender, de cultivar nuevos hobbies, de leer, de compartir con amigos, de disfrutar de la pareja si se la tiene, o buscar sin horarios, sin obligaciones laborales, otras opciones que la vida pueda deparar.
Olvídate de resignarte a pasar el resto de tu vida en la placita alimentando palomas o vivir a la sombra de los hijos.
El hecho de ser retirado, pensionado, no implica retirarse de los placeres que la vida otorga en esta nueva etapa.
Entre cajeros e Internet
Una valla a vencer en estos momentos actuales, para algunos adultos mayores, es la cibernética. Ya tenías bastante con los cajeros ATM para cobrar el retiro o jubilación, que ahora te bombardean con los celulares inteligentes, las tablets, la Internet, con sus mascotas: el Facebook, el Twitter o el Instagram! Ni la radio podías escuchar en paz porque estaba llena de funciones en letra pequeña que no se alcanzaba a entender y para colmo con manuales en inglés, alemán o chino.
Ya como si fuera poco, sus actualizadas amigas, no sólo le martirizaban con álbumes enteros de fotos de sus nietos, sino que también le enviaban montones de fotos por Internet.
¿Un consejo?
A no desesperar. Es muy bueno ir familiarizándose con los avances tecnológicos, que llegaron para quedarse, pero sin volverse locos y entrar en la vorágine de que lo último es lo mejor. Está bien que aprendas a usar la compu y que tengas un celular para que te localicen si puedes permitírtelo, pero tampoco tienes que correr tras la novedad.
Los controles en la tercera edad
Con la edad, cada vez se siente más temor y angustia antes de abrir los sobres para leer el diagnóstico y el resultado de los controles y estudios realizados. El solo basta la salud se va convirtiendo en un axioma cada vez mas respetado. No dejes de cuidarte lo mas posible, pero sin volverte hipocondríaca o estar todo el tiempo hablando del doctor.
Para ponerle un poco de humor al tema médico, se puede decir que el dermatólogo durante esta década se convierte, junto al siempre vigente cirujano plástico, en el otro gran campeón hípico en la carrera de detener el tiempo. Y no hay que dejar de mencionar al odontólogo que en este período se ocupa no sólo de pernos y coronas sino también de implantes.
Las manchas, el pelo, y las arrugas se vuelven temas excluyentes. Relájate y aprende a disfrutar de la experiencia ganada hasta el momento. Esto no quiere decir dejar de lado la coquetería, sino mejorar la alimentación, la calidad de vida y los cuidados personales para verte bien, sin necesidad de hacerte de nuevo, ni recurrir inevitablemente al bisturí.
Consejos de oro
“El estilo y la actitud son importantes para parecer pero, lo son mas para sentirte y ser”
Toma en cuenta estos consejos
- Arréglate para sentirte bien aunque no salgas de tu casa.
- Todo trabajo, actividad cultural, social o lúdica, toda tarea hogareña que te de placer y te mantenga activa, aumentará tu auto estima. En mente ocupada no entra la depresión.
- Estar informada es un importante modo de mantenerte vigente. Lee libros, periódicos, revistas de divulgación y escucha radio o mira televisión para opinar en cualquier conversación.
- No son las arrugas las que denotan la edad, sin la postura, la actitud, los temas de conversación, lo actualizado de tu opinión y el mensaje que irradia tu cuerpo.